El 26 de Junio del 2024 me aventure a Viajar a Managua, Nicaruaga para cruzar algunos países de America Central hasta llegar a Mexico y seguir hasta cancun, el viaje comenzó con un vuelo que me llego tarde a la capital y donde al ver pasar la caja de la bici en el aeropuerto venia rota, un buen susto que me hizo pensar mil cosas mientras esperaba mi turno en migración, lo bueno fue que todo estaba completo, sin embargo me confiscaron la bici y me hicieron regresar al día siguiente por ella, para poder recuperarla, lo bueno fue que sin pagar impuestos o nada adicional. Me quede un día conociendo Managua con un compadre que conocí en el Hostal y estuvimos platicando y paseando durante el día, para la noche fui a merendar con una amigo y una amiga que conocí en el hostal para compartir la cena. Al día siguiente Sali temprano entre lluvia y un clima loco para recorrer 222 km hasta Choluteca en Honduras, empezamos fuerte y el tiempo del recorrido fue de casi 13 horas.
Al día siguiente salimos para Tegucigalpa con algo de lluvia y cansados para tener todo el día subida, inclusive la subida de la muerte con lluvia que nos costo mucho trabajo. En el camino encontramos una pareja cicloviajera de un Frances con una rusa y un hijo en un remolque que venían desde Mexico, vaya recorrido. Fue un día muy pesado y me quedé a 30 km de Tegucigalpa donde tuve que pedir aventón, una familia me subió a su pickup doble cabina, y cuidaron de mi de regreso, me invitaron un cocktail de fruta picada y luego me invitaron a su casa donde estuvimos platicando y probando unos tamales de elote muy buenos, después me llevaron al hostal donde me albergaria. La suerte y el amor de encontrar gente buena en el camino no deja de sorprenderme y lo celebro en cada ocasión. Al día siguiente me quede a conocer un poco de Tegucigalpa, la catedral, el mercado, la plaza principal un asador tradicional y luego en la tarde cayo un chubasco memorable.
El lunes arranque de madrugada y me dieron un aventón para salir de la ciudad, un chofer de la misma persona que me levanto para dejarme en el mismo punto y poder ahorrarme 2 horas de subida en trafico complicado para salir de la ciudad. En el camino un motociclista me alcanzo para regalarme un Gatorade frio porque estaba haciendo calor y humedad y ese día cruce a el Salvador y me quede en el pueblo de San Miguel que también llegue muy tarde, ya que rodé 12 horas y fueron 195 km, me quede en un motel y pude cenar en una pupusería de enfrente. La carretera estaba decente y el trafico aceptable, pero los ríos que cruce estaban bastante sucios y el panorama no es muy prometedor por la pobreza que hay en el país, el avance fue bueno. Al día siguiente llegue a San Salvador, con una ponchadura en el camino y llegamos empapados de sudor, aunque no fue mucha distancia el desnivel y las carreteras limitadas hace el avance pesado y de mucha atención por el trafico local, que no están tan acostumbrados a las bicicletas. Me instale en San Salvador cerca del centro, salí a comer un subway y se cayo el cielo por el Huracán que estaba entrando en el golfo, ríos inmensos que inundaron la ciudad temporalmente. En la noche trate de salir a buscar comida pero todo estaba cerrado y apagado sin nadie en la calle, por lo que regrese al hotel y un Brasileño me compartió de su pizza para cenar.
En la mañana Sali al centro solo a conocer el mercado y el palacio de gobierno, después de un desayuno tradicional me fui hacia la frontera norte con Guatemala hasta Ahuachapan a 16 km de la frontera Chinamas con Guatemala, 8 horas de pedaleo con algo de desnivel que me costaron trabajo, pero que pude descansar bien por la noche. Al día siguiente con 12 horas de tiempo llegue a la ciudad de Guatemala, con 2,595 metros de desnivel que se sintieron bastante con mucho calor y empapado, me instale en un hostal por dos noches para conocer un poco. Pude visitar el mercado central, la catedral, el palacio de gobierno y dar una vuelta por la ciudad, que a diferencia de los otros países Guatemala es un lugar que se siente mas seguro y mas agradable, casi ya me sentía en casa. Después del descanso y de comer bastantes cosas, como pepián o unos tacos de chicharrones, al día siguiente sali con la cola del huracán que seguía acechando la zona para recorrer 205 km toda la frontera sur de Guatemala hasta llegar a los Amates donde pase la noche y cambie la ruta para dirigirme al día siguiente a Puerto barrios donde pretendía cruzar en el ferry de las 11 de la mañana, por lo que salí de madrugada.
En el puerto me informaron que los domingos ya no salía la lancha porque los impuestos eran muy caros en Belice, así que me quede varado una noche en el puerto, que prácticamente cruzan mucho plátano y otras frutas de centroamerica rumbo a Mexico y USA. Los dueños del hotel me recomendaron lugares para comer e inclusive me llevaron a esos lugares, una pareja muy amorosa y con una historia de amor muy reconocida. Al día siguiente Cruce a Belice en una lancha llena para llegar a Punta gorda Belice. En Belice avance 103 km para llegar a un pueblito donde comercios y hoteles son de chinos, después de un día de mucho calor y muy expuesto, ya que Belice es plano y no hay sombras o recursos en la carretera, fue muy pesado. En el camino conocí una familia muy agradable en una tiendita y me quede platicando con ellos un buen rato a la sombra. Me querían invitar mi Coca helada, pero se las pague y también invite a un señor grande que paso por un refresco también.
El siguiente día fue un día largo de 180 km a la ciudad de Belice, mucho calor, muy plano, con mucha humedad así que fue pesado pero llegamos comimos y al día siguiente nos fuimos temprano ya que la ciudad no tenia nada que ofrecernos, la entrada a la capital es el cementerio local y la ciudad esta muy maltratada por los huracanes, por lo mismo ya no es la capital del país y se mando a Belmopán Temprano salimos para llegar directo a Bacalar 186 km mas adelante, entrando a México por la frontera Sur y comenzando a disfrutar de comida conocida, con sazón, sabor y amor de México Lindo y Querido. Estar recorriendo tierras nacionales me dio nuevo animo y a seguir pedaleando aun en un calor extremo, pero con opciones de comida y bebidas ya conocidas.
El avance fue considerable primero a Felipe Carillo puerto, luego a Puerto Aventuras, luego a Playa del Carmen y Luego a Cancún, donde fui visitando a amigos del alma y familia con la que crecí, que todos me recibieron con el corazón abierto y abrazando mi aventura como propia. No dejo de agradecerle a la vida todas estas personas que me han acompañado en mi recorrido y siempre van conmigo. Los amo con todo mi corazón, llegue a Cancún 17 días después con 2,000 km recorridos en 5 países nuevos y parte de México. Fue un viaje relámpago con mucho avance y mucha información que procesar, ya que son países que no es tan en las mejores circunstancia de Gobierno o de Economía, por lo que pueden verse muchas situaciones sociales y ambientales limitadas para sus habitantes. El mundo sigue abriéndose para mi y enseñándome a cada pedalada, la gente en todo momento ha sido muy amable conmigo, me ha ayudado y me he sentido cuidado, esto es un nuevo aprendizaje profundo y MIENTRAS YO SIGO PEDALEANDO….